Escalas psicométricas de Despersonalización
Vamos con un resumen de las escalas psicométricas para medir la despersonalización-desrealización validadas hasta la actualidad.
De algunas de ellas ya os he hablado, como de la Escala de Dixon (1963), la primera que se creo; o la Escala de Despersonalización de Cambridge (CDS) (Sierra & Berrios, 2000), que la que mejores resultados ha brindado, la cual está fijada en una publicación.
Al final del carrusel os dejare las fuentes de la que saqué el contenido y que es de acceso gratuito, tanto para paciente interesados como para profesionales.
Primero que todo, antes de la existencia de escalas concretas de despersonalización, surgieron ítems o cuestiones concretas que la medían en escalas que estudiaban otra variable.
Uno de los autores más destacados fue Bernard-Leroy, que en 1898 incluyó 5 ítems específicos que medía una gran variedad de aspectos referentes a psicopatología general. Veamos dos ejemplos:
Ítem 32: “¿Son acompañados tus falsos reconocimientos por la impresión de que eres testigo único del desdoblamiento inevitable e involuntario de tus acciones, movimientos, pensamientos y sentimientos, como si pertenecieran a cualquiera?”
Ítem 34: “¿Han perdido los objetos su aspecto natural, parecen extraños o sorprendentes?”
El Cuestionario de Heymans (1906) es otro que también incluye algunos ítems ligados a las experiencias de despersonalización.
Existen más, pero basta con mencionar algunos para introducir la idea de que la despersonalización ya se computaba en escalas que medían otras variables.
La primera escala de despersonalización en ser validada psicométricamente fue el Cuestionario Autoadministrado de Dixon (Dixon, 1963). Consta de 12 ítems sobre despersonalización empleados en población normal, es decir, en personas que no necesariamente tenían la sintomatología de despersonalización. Sus principales críticas han sido la poca representatividad de la muestra y que algunos de sus ítems no están en sintonía con la definiciones clásicas de despersonalización realizadas por determinados autores.
La segunda es la Escala de Despersonalización de Jacobs y Bovasso (Jacobs y Bovasso, 1992). Muy ligada a la de Dixon, incluye 9 de sus 12 ítems y permite diferenciar sujetos normales de pacientes con sintomatología de despersonalización.
Consta de 25 ítems, fue validada en población estudiantil y presenta 5 factores: Inautenticidad, Negación del self, Autoobservación, Desrealización y Separación del cuerpo. Se centra principalmente en las alteraciones cognitivas. Su principal crítica es carecer de un marco teórico adecuado.
La siguiente es la Escala de Fewtrell (Fewtrell, 2000), que consta de 35 ítems que incluyen síntomas de despersonalización, desrealización, *desomatización y *desafectuación. A diferencia de las dos escalas anteriores, está ha demostrado validez en población patológica. Su principal crítica es que no abarca todos los aspectos de la sintomatología DPDR.
Con “desomatización” entiendo que se refiere a percibirse distante de los procesos corporales; y con “desafectuación” a percibirse distante de los procesos emocionales. No obstante, es mi interpretación, no he encontrado la definición exacta según el autor.
Pasamos a la Escala de Severidad de Despersonalización (Simeon, 2001), que consta de 6 ítems que miden la experiencias DPDR durante las dos últimas semanas. Su validez ha sido demostrada en población patológica.
El Inventario de Despersonalización-Desrealización (Cox & Swinson, 2002) fue creado para evaluar las experiencias DPDR en trastornos de ansiedad. Consta de 28 ítems y también ha sido validada en población patológica.
Sobre la Escala de Despersonalización de Cambridge (Sierra & Berrios, 2000) no diré nada ya que está en una entrada aparte ya que es especial.
Por último vamos con la Escala de Despersonalización presente-vida (DP-DV) (Baquero y cols, 2009), la cual se basa en los ítems de la CDS validada al español.
Esta escala destaca porque evalúa la presencia de sintomatología DPDR no sólo durante un periodo determinado (6 meses como la CDS), sino que los evalúa a lo largo de la vida.
Está divida en dos partes:
- Parte A: 28 ítems sacados de la CDS versión española
- Parte B: 14 nuevos ítems obtenidos a través de la descripción de pacientes son sintomatología DPDR
Esta escala se creó en España, a través de una investigación realizada en la Universidad de Barcelona, siendo publicada en la revista “Archivos de Psiquiatría”
Está diseñada para aplicarse en población patológica. Es la primera escala que mide la DPDR a lo largo de la vida

Las críticas hacia esta escala son el haber utilizado una gran variedad de diagnósticos en la muestra estudiada, lo que conlleva una dificultad en la generalización de los resultados, es decir, es aplicable en población no sana. Además, no se han utilizado entrevistas estructuradas para determinar el diagnóstico.
No obstante, ha demostrado ser una herramienta fiable y válida.

Y hasta aquí el recorrido histórico de escalas que mide la DPDR en concreto. No obstante, hay escalas disociativas que incluyen ítems sobre DPDR, como la Escala de Experiencias Disociativas (DES), pero eso lo dejamos para otro carrusel.
Referencias bibliográficas:
Berge, D., Berrios, G., Bulbuena, A., Martín-Santos, R., Pailhez, G., Sperry, L., & Valls, S. (2009). Síntomas de despersonalización en pacientes psiquiátricos: La nueva escala de despersonalización presente-vida (DP-DV). Archivos de Psiquiatría, 1-4(72), 1-13.
Molina Castillo, J. J. (2008). Adaptación y validación al castellano de la Escala de Despersonalización de Cambridge. [Tesis doctoral, Universidad de Córdoba]. Universidad de Córdoba – Servicio de Publicaciones.